¿Qué tan bueno o qué tan mala es la autoexploración?… eso a lo que llamamos masturbación sigue siendo un tabú, a pesar de vivir en un mundo con términos tan inclusivos y “Open mind”.
La masturbación comienza desde a una edad muy temprana, en el momento en que empezamos a autoexplorarnos. Se potencializa en la pubertad por todos los cambios hormonales que tiene nuestro cuerpo, para prepararse para la reproducción. Así que no importa si eres gay, hetero o lesbiana, estos cambios suceden y esta intensidad por autoexplorarnos se incrementa, sobre todo en esta etapa.
Sin embargo, esta exploración sexual todavía no es vista por buenos ojos por la sociedad y genera que sea algo prohibido, oculto y hasta sucio… seguramente has escuchado comentarios como: ¡Te saldrán pelos en la mano!, ¡si lo haces ya no tendrás potencia sexual!, ¡te vas a quedar ciego!, ¡te vas a volver infértil!, entre otras frases absurdas más.

De hecho, contrario a los prejuicios que hay sobre la masturbación, te vas a sorprender si te digo que esta tiene mayores beneficios positivos, como:
- Mejora la calidad del sueño
- Libera tensión
- Da movilidad a la zona pélvica
- Reduce el estrés
- Obtienes placer
TENGA, una empresa que realizó una encuesta de masturbación, arrojó que en el mundo el 78% de las personas se masturban y que lo admiten más los hombres que las mujeres… y que nosotros gays nos masturbamos un 28% más que los heterosexuales.
Lo que si, es que requieres conocer tu cuerpo y realizar esta práctica de masturbación de manera consiente, recordar que es un acto saludable y que está alejado de generarte un trastorno físico, emocional o psicológico.

¡Autoexplórate! Pero no abuses, así mismo analiza con quién compartes tu energía sexual y si prefieres practicarlo solo a tu ritmo y tu espacio, olvídate de tantos tabúes.
Disfruta tu sexualidad y PUNTO.