¿Cuántas veces te has peleado con tu familia por no pensar de la misma manera que ell@s? ¿Cuántas veces has sentido que a pesar de amarlos no encajas? Si te pasa esto probablemente seas la oveja negra de la familia, pero tranquil@, esto no significa precisamente que sea algo malo.
Por si no lo sabías, en la industria textil la lana de las ovejas negras es más difícil de teñir a comparación de la lana de las ovejas blancas, que es más flexible, por lo que al usar esta frase se hace referencia a que eres alguien difícil de manipular, ¿Pero en realidad eso es algo malo?
Cada familia sigue patrones de conducta que se van heredando a lo largo de generaciones, si ponemos atención se pueden observar, por ejemplo: familias donde todos los hij@s terminan divorciad@s por cuernear a su pareja al igual que mamá o papá, familias donde todos los hijos hombres terminan teniendo hijos con diferentes mujeres al igual que el abuelo y los tíos, familias donde todas las mujeres terminan siendo madres solteras y resentidas con los hombres o familias que usan frases como: “pobres, pero felices”,” aquí pura mujer guerrera y luchona”, “el amor no existe, “todos los hombres son iguales”, “No puedo” etc.
En la mayoría de las familias, siempre existirá el integrante que no pensará de la misma manera y se revelara ante estas creencias y comportamientos, esto en el mayor de los casos suele generar una mala respuesta de parte de los integrantes que son fieles a estos patrones, por lo que el rechazo y prejuicio de estos integrantes se hará una realidad, convirtiéndote en la “oveja negra” la familia.
Si eres la oveja negra de la familia, no dudes en defender tus ideales y tu identidad de una manera pacífica, ten en mente que por serlo, no te da la tarea de cambiar a tu familia, esa decisión será solo de ell@s, tal vez solo eres la esperanza y el ejemplo para las nuevas generaciones, si no te identificas como la oveja negra, probablemente estás corriendo en círculos, pero ojo, esto no significa que no puedas romper el patrón, solo es cuestión de que decidas cambiar tu rumbo.
Rompiendo patrones familiares
Puede ser un proceso desafiante, pero también liberador. Aquí te presento algunos pasos para ayudarte a romper esos patrones y crear un futuro más saludable:
1. Reconoce y acepta: Reconoce los patrones familiares que te gustaría cambiar y acepta que son una parte de tu historia, pero no definen tu futuro.
2. Identifica las causas: Investiga las razones detrás de esos patrones. ¿Fue debido a la falta de comunicación, la pobreza, la violencia o algo más?
3. Desarrolla autoconciencia: Aprende a reconocer tus pensamientos, emociones y comportamientos. Esto te ayudará a identificar cuándo estás repitiendo patrones familiares.
4. Establece límites saludables: Aprende a decir “no” y establece límites claros con tus familiares y amigos.
5. Busca apoyo: Rodéate de personas que te apoyen y te animen a crecer.
6. Practica la autocompasión: Sé amable contigo mism@ y recuerda que romper patrones familiares es un proceso que lleva tiempo.
7. Celebra tus logros: Celebra cada pequeño logro en tu camino hacia la libertad y el crecimiento.
Recuerda que romper patrones familiares es un viaje, no un destino. Con paciencia, perseverancia y apoyo, puedes crear un futuro más saludable para ti y tus seres queridos. Y tú ¿Eres la oveja negra de la familia?
